Kenneth Arrow (Nueva York, 1921), ganador del Premio Nobel de Economía en 1972, es uno de los notables de la escuela neoclásica de economía. Sus aportes hicieron época en teoría pura, finanzas y crecimiento económico
Por Ricardo Crespo (IAE)
Graduado en 1940 como Bachelor of Science in Social Science, con orientación en Matemáticas, Arrow cursó un Master en Matemáticas en la Universidad de Columbia (1941). Durante la Segunda Guerra Mundial se desempeñó como oficial de la Fuerza Aérea, donde colaboró en investigaciones sobre el uso óptimo de las alas en los aviones. Incluso, publicó un artículo sobre el tema en el "Journal of Meteorology", en 1949.
Tras la guerra, retomó sus estudios en Columbia donde, en 1947, comenzó a colaborar con Jacob Marschak, en la Cowles Commission de la Universidad de Chicago. Allí comenzó una extensa carrera docente que lo llevó a las prestigiosas universidades de Harvard y Stanford hasta su retiro en 1991 (aunque sigue siendo profesor emérito de Stanford). ¿Cuáles fueron sus principales aportes?
El famoso "teorema de Arrow"
El "Teorema de la Imposibilidad de Arrow", que forma parte de su tesis doctoral en Columbia (1951), demuestra la imposibilidad de establecer un orden de preferencias sociales (bajo ciertas condiciones aceptables) a partir de las preferencias individuales. Al fracasar el acuerdo por la "vía democrática", Arrow concluye que se requiere un "dictador" que imponga su propio orden de preferencias sobre la sociedad.
Esta conclusión disparó una fuerte polémica. El economista indio, Amartya Sen, sostuvo la imposibilidad de un liberal paretiano. Bajo estas condiciones, en última instancia, la sociedad debería elegir: ¿libertad o igualdad?
La Teoría del Equilibrio General
Las investigaciones de Arrow sobre la economía del bienestar se desarrollaron en el marco teórico del Equilibrio General. Sin embargo, la existencia misma de un "equilibrio general" era un factor que necesitaba una demostración. Junto con el economista francés, Gerard Debreu, Arrow publicó un famoso artículo que prueba la existencia de un equilibrio competitivo (Econometrica, 1954).
Las conclusiones de este famoso estudio justificaron el predominio de la Teoría del Equilibrio General en la economía teórica hasta nuestros días, a pesar de los fuertes embates recibidos por la "tesis Sonnenschein-Mantel-Debreu", que demuestra la imposibilidad de obtener un equilibrio único bajo las hipótesis usuales.
Otros aportes: crecimiento y finanzas
Arrow fue pionero en considerar al cambio técnico como factor endógeno en las teorías de crecimiento económico. Desde su novedoso enfoque, la comprensión del crecimiento presupone una comprensión de las causas de la innovación.
Las finanzas no quedaron fuera de los intereses de este polifacético economista. En un artículo sobre seguros médicos, Arrow introdujo el concepto de "moral hazard" (riesgo moral), generado por la información asimétrica entre agentes.
Si bien Arrow es un gran exponente de la teoría económica neoclásica, no ha temido cuestionar algunos de sus supuestos fundamentales. En un trabajo de 1994, relativizó el individualismo metodológico, un postulado básico que sostiene que las grandes magnitudes macroeconómicas son el resultado de la agregación de magnitudes individuales.
¿Cómo resumir, en tan poco espacio, el impresionante trabajo de este intelectual?
Digamos, a modo de cierre, que Kenneth Arrow es uno de los economistas vivos más respetados y prolíficos, con muchos aportes profundos y novedosos en campos muy variados. Algo que no se ve muchas veces.
Ricardo Crespo
Profesor de Economía
IAE, Escuela de Negocios de la Universidad Austral